Quienes somos

Quienes somos

Toda la vida me gustó la enseñanza. Ya con 14 años empecé a dar clases en mi casa de Oviedo, para poder comprarme una bicicleta de carreras, que es mi otra afición. Pero al empezar los estudios de Ingeniería, y sobre todo conocer a una mujer extraordinaria (que hoy es mi mujer), tuve que dejar la bicicleta, pero no la enseñanza. Empecé en Oviedo en la Academia de Carmina (ya casado, y estudiando), para poder vivir.

Una vez en Valencia, ya trabajando como Ingeniero en el Puerto de Sagunto, volvió el gusanillo de la enseñanza. Una vez, paseando enfrente del Instituto de San Vicente Ferrer, ví un piso que se alquilaba, y se me ocurrió la idea de montar allí una academia, aprovechando la proximidad del Instituto. Así empezó, hace 35 años la aventura.
En principio, los alumnos eran de bachillerato, y un buen día apareció un chico, y me preguntó si le daría clases de matemáticas de primero de Agrónomos (era alumno del Sr Pellicer). Así fue y aprobó. Al año siguiente, volvió para ver si le daría las matemáticas de segundo (era alumno del Sr Molina y la Sra Mª José Rivera), cuya asignatura era especialmente dura, y mira por dónde aprobó. Al año siguiente vinieron cuatro amigos, que aprobaron, al año siguiente 20 y así sucesivamente, hasta llegar a tener que guardar plaza con al menos un año de antelación.

Y ésta es para mí, la bonita historia de la Academia, que tantas satisfacciones me ha dado, teniendo alumnos famosos como Arturo Valls, Nacho Diago (el mago) y muchos más.

He tenido la suerte de tener una hija, Gaby, hoy Ingeniero de Caminos, que comparte conmigo, el gusto por la enseñanza, y que, poco a poco va tomando las riendas de éste Centro. Debo decir, con orgullo, que yo a su lado, soy un aprendiz, porque es muy buena. No lo digo yo, lo dicen sus alumnos.

 

Contacta Con Nosotros